Incertidumbre laboral tras la confiscación de la UCA

No todo el personal de la Universidad Centroamericana (UCA), ahora llamada Casimiro Sotelo, serían reintegrados a trabajar, afirmó a Onda Local, un exdocente.

La fuente aseguró que el viernes 18 de agosto, varios docentes no fueron llamados por las autoridades impuestas por el régimen Ortega Murillo. “A mí no me llamaron, hasta ahora (viernes por la tarde) sigo esperando alguna comunicación”.

Sin embargo, otros docentes si fueron convocados. “A los que van a reintegrar los llamaron a asistir a una asamblea hoy (18 de agosto). Me dijeron que depuraron una lista de trabajadores”, comentó el exdocente.

Onda Local intentó comunicarse con David López, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Centroamericana (STUCA), para obtener información sobre cuantos trabajadores serían reintegrados a sus labores, sin embargo, no respondió a las llamadas. Según la fuente, López ayudaría a seleccionar a las y los trabajadores que se reintegrarían a la nueva universidad creada en las instalaciones y con recursos de la universidad jesuita confiscada.

Autoridades impuestas anuncian inicio de clases

Las autoridades de la universidad orteguista anunciaron que “del 22 al 27 de agosto del año en curso, estará habilitado el Sistema de Registro Académico, con la finalidad de concretar la matrícula respectiva al II Semestre Académico del Año Lectivo 2023”.

Así mismo, indica que “las actividades académicas del II Semestre Académico del Año Lectivo 2023, iniciarán este próximo 28 de agosto, por lo que se les hace el llamado a todos los estudiantes a integrarse a los procesos educativos”. En el caso de las áreas de posgrado y cursos libres, anunciaron que estos continuarán a partir del 26 de agosto.

El exdocente de la UCA señala que con este anuncio da por hecho que no será reintegrado. “Ahora solo espero que me llamen para que me den mi liquidación”, expresó.

El día de la confiscación de la UCA, trabajadores denunciaron que no recibieron el pago correspondiente al mes de agosto.

“Inauguración”

Desde primeras horas de la mañana, personal de la Alcaldía de Managua limpiaba la entrada principal de la UCA y la cancha deportiva. Otros empleados borraban carteles alusivos a la universidad. Desaparecieron el emblema de la Compañía de Jesús que estaba en la entrada principal y la cancha deportiva fue adornada con banderas rojas y negras.

La toma de posesión de las autoridades impuestas por la dictadura se realizó la tarde del 18 de agosto en la cancha deportiva. Alejandro Genet Cruz, será el nuevo rector, Luz Marina Ortiz, vicerrectora general y Moisés Ignacio Palacios, secretario general.

UCR y CIHD, reaccionan ante confiscación de la UCA

Por su parte la Universidad de Costa Rica (UCR), a través de un pronunciamiento, manifestó su rechazó por el cierre y confiscación de la UCA

“Consciente de la importancia de la educación superior y el libre pensamiento en la construcción de sociedades justas y democráticas, denuncia con vehemencia el cierre de la Universidad Centroamericana (UCA) en Nicaragua por parte de la dictadura de Ortega y Murillo. Este lamentable acto refleja el temor del régimen a las voces críticas y al pensamiento independiente y autónomo que ha caracterizado a esta destacada institución a lo largo de su existencia. No es casualidad que con esta acción, la dictadura orteguista haya clausurado ya a más de 30 universidades”, señala el pronunciamiento.

La Universidad de Costa Rica hizo un llamado a la comunidad internacional, a las instituciones de educación superior y a todas las personas defensoras de la libertad y la justicia, a condenar la confiscación de la UCA.

“Este es un acto atroz de represión”, afirma la UCR y también pide unidad para mostrar solidaridad “con el pueblo nicaragüense y su derecho a una educación libre, crítica y de calidad”.

En tanto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en un comunicado de prensa pidió al régimen de Ortega y Murillo, liberar al obispo Rolando Álvarez, quien lleva más de un año detenido y también solicita respetar los derechos humanos.

En este comunicado resalto el caso de la UCA y destaca que a la fecha, diferentes colegios y Universidades vinculados con la Iglesia Católica han sido confiscados.

“El 9 de agosto de 2023, el Gobierno decidió congelar las cuentas bancarias e inmovilizar los bienes inmuebles de la Universidad Centroamericana en Managua (UCA), de propiedad de una comunidad católica. El 15 de agosto el Poder Judicial ordenó la incautación de todos los bienes muebles, inmuebles y cuentas bancarias de la UCA, bajo el argumento que, dicho Centro de Estudios, funcionó como un "centro de terrorismo, organizando grupos delincuenciales". A partir de esta fecha, todas las actividades académicas y administrativas han sido suspendidas, afectando el derecho a la educación, a la libertad de cátedra, a la libertad de expresión y al trabajo de un sinnúmero de nicaragüenses”, afirma la CIDH.