Es necesario mantener la palabra

Por Duyerling Ríos

En el X Festival Internacional de Poesía de Granada, dedicado al poeta nicaragüense Rubén Darío, se celebró un acto simbólico para enterrar el machismo y la violencia contra las mujeres. Mayra Oyuela, poetiza hondureña, se unió a la celebración:

Bien pudiste ser Helena
liderar naufragios, enloquecer hombres
hasta hundirlos en la cama de algas de tu vientre.
Bendita eres entre todas las mujeres
Bendita la zarza que te quema el vestido,
bendito el nylon que coses en las sombras,
bendito el grano que pesaste mientras se te hizo tarde para jugar.
¿Y si trasladamos la sal de tus pies por otros continentes?
Otra sería la luz que engordara tu ventana.
¿Y si por apellido te hubiesen dado quizás el Dietrich?
Cantarías como loca a la cordillera,
a la sal que amoldas como flor de invierno
blanca como la nieve que nunca viste.
Vos que nunca supiste de Rubens y sus mujeres,
vos que ignoras una torre de Pizza,
un bello sari en Estambul,
un beso de pasión en una sala de cine.
Pero qué bien comprendes el silencio
y qué bien sobrevivís a la historia
y aunque nadie conozca tu nombre
sabes más de la soledad que un monje del Tíbet.
Mujer repítete: 
Non omnis moriar, Non omnis moriar.
Nunca morirás del todo
¡Nunca!
porque la zarza que hace arder tu vestido
también hará arder la sal del mar que sostiene tu corazón

Con este poema Mayra rindió un homenaje a las muertas por feminicidios desde el año 2009 hasta la fecha. Nos comentó que día a día se recrudece la violencia contra las mujeres en Honduras, sobre todo a partir del Golpe de Estado.

“Decidí hacer este homenaje a todas esas mujeres que son heroínas silenciosas, porque Honduras es un país, como en el resto de Centroamérica, de mujeres, las mujeres prácticamente sostenemos nuestros países y lastimosamente en Honduras el gobierno es culpable del feminicidio. El gobierno con su silencio, con su apatía prácticamente no está matando”, exaltó.

“En Honduras cada dieciseises horas muere una mujer víctima de femicidio, es algo alarmante. Tampoco están protegiendo a la juventud, tampoco están protegiendo a la comunicad LGTBI  y los crímenes de odio se están expandiendo y lastimosamente esta violencia se generaliza y se normaliza, y al resto de la población termina por importarle poco, porque al principio se mueren dos mujeres y te duele, luego mueren cinco y te duele, pero a la tercera semana se mueren diez y ya no te parece tan importante. Entonces es necesario mantener la palabra, mantenernos diciendo estamos aquí, estamos vivas y queremos seguir vivas”.    

Al entierro del machismo y de la violencia asistieron poetas de 68 países y grupos nacionales que representaron parte de la cultura nicaragüense. Les invitamos a ver la galería de fotos. 

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