Informar para entender cambio climático
- 26 Oct 2016
- 12:10 p.m.
El Acuerdo de París sobre cambio climático entrará en vigencia a partir del 4 de noviembre de 2016, treinta días después de completarse las dos condiciones requeridas: que lo ratificaran 55 países miembros de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC) y que estos fuesen responsables de al menos el 55 por ciento de las emisiones mundiales de Gases de Efecto Invernadero (GEI).
Informar acerca de las acciones de los gobiernos en materia de políticas públicas de mitigación y adaptación al cambio climático es una función trascendental de los medios de comunicación. Por ello, la segunda sesión del Programa de Entrevistas Climáticas, organizada por Conexión Cop y El Arbol, analizó el rol de las políticas públicas de cambio climático en América Latina y cómo hacerle seguimiento a las acciones de los gobiernos desde los medios de comunicación.
Manuel Pulgar Vidal, abogado especializado en derecho ambiental y ex ministro del Ambiente del Perú, dijo que el éxito del Acuerdo de París está basado en la confianza.
Según Vidal, lo que el mundo ha definido tiene su llegada al 2030 y al 2050; y el país que no se suba al coche hoy, en el 2030 o 2050, lo lamentará.
Nicaragua es uno de los países que no se subió al carro. No firmó, ni ratificó el Acuerdo de París, ya que “no ayuda al cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 13 -tomar acciones urgentes para combatir el cambio climático y sus impactos-, produciendo una incoherencia de políticas globales y falta de sinergia entre la política de desarrollo y la política climática”, aseguró Paul Oquist, Ministro de Políticas Públicas del Gobierno de Nicaragua.
El Acuerdo de París tampoco frena el incremento de la temperatura a 2°C, agregó Oquist. "Ese mundo de alza de 3°C se traduce en menos agua, menos comida, reducciones en la salud y el bienestar”. El representante de Nicaragua señaló que el Acuerdo de París tampoco contempla financiamiento para pérdidas y daños y pretende que los países en desarrollo renuncien a exigir compensación y que se perdonen las responsabilidades jurídicas de los países causantes del problema. Hernán Carlino, especialista en política climática, con experiencia en economía, negociaciones internacionales, asuntos regulatorios y educación, manifestó que el objetivo de ir por debajo de los 2´C y proseguir por debajo de 1.5´C no puede lograrse sin “una meta complementaria, ir hacia la pobreza cero, eso significa mejorar la distribución del ingreso, crear empleos y aumentar la diversificación productiva”.
Las acciones de los gobiernos en materia de adaptación y mitigación al cambio climático deben aumentar la inclusión y no la exclusión. “No se puede plantear un camino de mitigación del cambio climático, de transformación, sino se corrigen los problemas estructurales que tiene la sociedad”, dijo Carlino.
En este contexto, los medios de comunicación tienen que informar a partir de la realidad de sus países. “Cuál es la realidad de México, Uruguay, Chile y Perú en relación a las emisiones. Chile es un país con dificultades en sus fuentes de energía, hay países que teniendo diversas fuentes energéticas, tienen niveles altos de deforestación”, considera Manuel Pulgar Vidal. Otra de las recomendaciones de Pulgar es la creación de mensajes claves o la narración de historias que tomen en cuenta las particularidades de los actores. Por ejemplo, hay que hablar con las autoridades locales acerca de conceptos como infraestructuras resilientes o ciudades sostenibles. “Cómo queremos orientar el transporte público, los residuos, la construcción sostenible”. Carlino dijo que la información sobre cambio climático es esencial, pero persiste la dificultad es que es un tema relativamente complejo y hace falta un lenguaje específico, una especie de traducción al lenguaje de la ciudadanía común. “Además de abrir la información, los gobiernos tienen que encontrar medios para comunicar lo que está en juego.
Si la ciudadanía no está informada de los procesos de transformación no va a tener legitimidad” Para Manuel Pulgar Vidal, también es importante que los medios de comunicación hagan conciencia del aporte de las personas cuando adoptan un consumo responsable para reducir las emisiones. “El consumidor empieza a preferir productos que sean orgánicos, sostenibles y sin carga climática. El consumidor empieza a evitar el plástico, a preferir los autos eléctricos, focos LED (bujías)”. Sin embargo, apunta Pulgar, las políticas públicas no siempre favorecen este cambio. “Las políticas públicas en nuestros países limitan ese cambio. Por ejemplo, un foco LED es muy costoso en comparación con un foco incandescente; y probablemente lo sea porque los aranceles de importación son excesivamente altos, hay que reducirlos, hay que utilizar el sistema fiscal. Qué tanto nuestra política tributaria nos impide traer autos eléctricos. Hay países que han implementado la iluminación pública con focos LED. La demanda global es que seamos energéticamente más eficientes, con menos emisiones”, señaló.
Lo energético sigue siendo el gran reto de Americe Latina y los contextos varían en cada país. Chile, por ejemplo, tiene dificultades en sus fuentes porque no tiene las grandes fuentes energéticas que sí tienen Argentina o Bolivia. “Hay que conocer la realidad energética de cada país para saber cómo establecer las estrategias de largo plazo. No puede ser la generación eléctrica fuente de deforestación y desplazamiento de poblaciones porque el costo es demasiado alto en relación al beneficio. Hay otras fuentes energéticas renovables que pueden ser más sostenibles y de menos impactos que las hidroeléctricas”, enfatizó el ex ministro del ambiente de Perú.
Es muy importante que el periodismo recurra a las autoridades para que trasmitan información acerca de las fuentes de emisiones, metas de adaptación y retos en temas tan importantes como el de la energía, recomendó Manuel Pulgar.
ConexiónCOP elaboró una infografía del estado de los compromisos asumidos por los países de Latinoamérica y El Caribe. Las contribuciones climáticas son los esfuerzos de cada país para hacerle frente al cambio climático mediante programas de mitigación y de adaptación. Si bien, Latinoamérica y El Caribe representan sólo el 7% de las emisiones del planeta (9.6% si se incluye las emisiones vinculadas a la deforestación y uso del suelo), es importante que cada país tenga un compromiso de reducción, para sumar al esfuerzo global y orientarse hacia un desarrollo bajo en carbono.