Mujeres nicaragüenses exiliadas en Costa Rica: ¡Vamos a volver!
- 08 Mar 2024
- 7:45 p.m.
- San José, Costa Rica
“Vamos a volver a las calles juntas. Volveremos a abrazarnos cada 8 de marzo. Las semillas van a florecer”, se lee en una pancarta en la marcha de este 8 de marzo en Costa Rica. Las nicaragüenses exiliadas en este país se sumaron a la conmemoración del Día Internacional de la Mujer.
Marcharon por las que no pueden en Nicaragua. Un grupo de mujeres porta una manta azul que, en letras blancas, dice: “Libertad para las presas políticas”. Atrás, otro grupo porta pancartas con las fotografías y nombres de las presas políticas de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua: Anielka García, Nelly López, Evelyn Guillen, Adela Espinoza, Olesia Muñoz, Gabriela Morales, Martha Centeno, Melba Hernández, Josseling Campos, Martha Rivas, Jacqueline Rodríguez, entre otras.
“Todas las mujeres tenemos un deseo, que la dictadura se vaya de paseo. Pasito pa delante, pasito para atrás, pasito para un lado, pasito para allá. Todas las mujeres tenemos un deseo que la dictadura se vaya de paseo”, cantaron y bailaron a ritmo de tambores y matracas.
“¡Libertad, libertad a las presas por luchar!, ¡Florecerá Nicaragua, libre y feminista!, corearon a todo pulmón.
Libertad para la comunicadora social Adela Espinoza
La organización Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN) en un comunicado difundido este 8 de marzo, demandó la libertad de la comunicadora social, Adela Espinoza, quien fue detenida el 19 de agosto de 2023. Paralelamente, también fue secuestrada la feminista y activista Gabriela Morales.
La Comisión de Género de PCIN condenó las agresiones contra las periodistas nicaragüense a manos de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
PCIN resaltó la labor y el coraje de las periodistas que, pese al acoso, las amenazas, las diferencias de género y los pocos espacios para expresarse, continúan alzando su voz desde diferentes plataformas digitales.
“El exilio forzado es otra realidad que ha precarizado la labor de informar. Mujeres periodistas se han visto obligadas a dejar la profesión para ejercer trabajos domésticos, de hostelería, labores de cuido, en limpieza; como teleoperadoras; preparando comida para vender, entre otras. Para sobrevivir han tenido que realizar dobles jornadas o trabajos extras”, menciona el comunicado de PCIN.
Además, PCIN destacó que, los países de acogida de las periodistas, como Costa Rica y El Salvador, están viviendo la instauración de regímenes autoritarios que impactan la vida de periodistas exiliadas. Las periodistas que permanecen dentro de Nicaragua también viven en precariedad, lo cual limita su ejercicio profesional.