Valdrack debuta como canciller lamentando sanciones

En un encuentro con el cuerpo diplomático acreditado en Nicaragua, desarrollado este miércoles 11 de septiembre, Valdrack Jaentschke, quien sustituyó en el cargo de canciller a Dennis Moncada por ordenes de Rosario Murillo, refirió que las sanciones impuestas al régimen Ortega Murillo principalmente por Estados Unidos y la Unión Europea, son agresiones por resistirse a la dominación y a la injerencia.

“Nicaragua seguirá denunciando las medidas coercitivas unilaterales o las mal llamadas sanciones, que para nosotros no son más que agresiones en contra de los Pueblos que se resisten a la dominación hegemónica, a la injerencia en sus asuntos internos” lamentó Jaentschke.

El nuevo canciller dijo además, en concordancia con la retórica de Ortega y Murillo, que Nicaragua seguirá trabajando “por terminar de construir un mundo multipolar en el que las naciones se reconocen como iguales, por el bienestar e inclusión de toda la humanidad”.

Valdrack Jaentschke es considerado uno de los operadores políticos más leales al régimen Ortega Murillo. Ha servido a la dictadura en puestos vinculados a asuntos internacionales. Entre 2007 y 2021, fungió como vicecanciller. En 2022, fue nombrado ministro consejero con funciones consulares en la embajada de Nicaragua en Costa Rica, adicionalmente ostentaba el cargo de ministro asesor de la presidencia para políticas y asuntos internacionales. El régimen impulsó su candidatura a la secretaria general del SICA, pero fracasó en su intento, tras el fracaso fue nombrado canciller el pasado 6 de septiembre.

Califica de “sincera” y “afectiva” la diplomacia

El nuevo canciller se declaró defensor del planeta y calificó la diplomacia nicaragüense como sincera y afectiva, entre otros calificativos.

“Continuaremos defendiendo el planeta, reiterando que nuestro país, es parte de una de las regiones del mundo con mayor vulnerabilidad climática” refirió Jaentschke, en clara alusión a la comunidad internacional de la necesidad de fondos para proyectos climáticos como el fracasado Bio Clima que fue suspendido por el Fondo Verde por no cumplir con los estándares establecidos.

El canciller orteguista enalteció el trabajo de la Cancillería, refiriendo que “nosotros practicamos una diplomacia clara, cordial, sincera, incluso afectiva. Tengan la seguridad que vamos a mantener eso”.  

Sin embargo las palabras de Jaentschke se estrellan contra las acciones del régimen que evidencian una diplomacia revanchista caracterizada por insultos contra la comunidad internacional, la expulsión de embajadores, la ruptura de relaciones con países y foros internacionales que han criticado el modelo autoritario del régimen, a lo que se suma la confiscación de sedes diplomáticas como la de la OEA y la de la embajada de Taiwán.

El último incidente diplomático ocurrió a inicios de agosto, cuando Daniel Ortega expulsó al embajador de Brasil en Nicaragua, Breno de Souza Días da Costa, por no asistir al acto de celebración del 45 aniversario de la revolución sandinista el pasado 19 de julio. Brasil respondió con una medida reciproca expulsando a la embajadora de Nicaragua, Fulvia Castro.

Jaentschke se declaró ante el cuerpo diplomático como “una persona accesible” y agregó que “para mí no existe ni un solo tema que no pueda ser conversado y discutido, aún en las condiciones más difíciles”.