Estado de Nicaragua desacata resoluciones sobre liberación de cuatro líderes indígenas detenidos arbitrariamente
- 20 Ene 2025
- 6:40 p.m.
- Managua
El Centro de Asistencia Legal a Pueblos Indígenas (CALPI) recordó que el Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de las Naciones Unidas (ONU) emitió la Opinión núm. 30/2024, exigiendo al Estado de Nicaragua la liberación inmediata y la concesión de indemnizaciones a cuatro líderes indígenas: Ignacio Celso Lino, Argüello Celso Lino, Donald Andrés Bruno Arcángel y Dionisio Robins Zacarías.
Los cuatro hombres, autoridades y guardabosques indígenas dedicados a la defensa de sus territorios ancestrales, han estado encarcelados arbitrariamente desde 2022, cumpliendo condenas de cadena perpetua.
El dictamen de la ONU subraya la persecución e intimidación que sufren los pueblos indígenas en Nicaragua por defender sus tierras. El Grupo de Trabajo se muestra "convencido de que los Pueblos Indígenas que defienden su territorio están siendo perseguidos e intimidados". La Opinión también destaca que tanto la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) como la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos han alertado previamente sobre esta grave situación.
En abril de 2023, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a favor de los indígenas y solicitó al Estado de Nicaragua adoptar las medidas necesarias para proteger los derechos a la vida, integridad personal y salud de los beneficiarios, considerando su condición de personas pertenecientes a un pueblo indígena. Asimismo, le solicitó adoptar las medidas necesarias para asegurar que las condiciones de detención de los beneficiarios sean compatibles con los estándares internacionales.
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Por su parte, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), otorgó medidas provisionales y exigió la liberación de los líderes indígenas. Sin embargo, el Estado de Nicaragua ha ignorado sistemáticamente las resoluciones de estos organismos internacionales, incluyendo ahora el dictamen del Grupo de Trabajo de la ONU.
La persistente detención de estos líderes indígenas, a pesar de los llamados internacionales, evidencia una grave violación de los derechos humanos y una preocupante falta de respeto por las decisiones de organismos internacionales por parte del Estado de Nicaragua.
Este caso pone de manifiesto la continua lucha de los pueblos indígenas en Nicaragua por la defensa de sus derechos territoriales y la persistente impunidad frente a las violaciones de derechos humanos.