Periodistas nicaragüenses en el exilio: Constancia frente al infortunio

Mujeres y hombres de prensa nicaragüenses que se vieron obligados a abandonar el país ante la censura y la represión de la dictadura Ortega Murillo, viven un exilio lleno de adversidades y desesperanza, lo cual enfrentan con firmeza resiliencia y constancia.

Así lo revela un diagnóstico situacional presentado el 28 de noviembre por la Asociación de Periodistas y Comunicadores Independientes (PCIN). El estudio expone en sus páginas las diferentes situaciones adversas que soportan las y los periodistas en los países de acogida, abarcando la situación laboral y económica, el estatus migratorio y la salud física y emocional, entre otros aspectos. El documento además resalta cómo en medio de esas vicisitudes, estos hombres y mujeres, desde el exilio, han logrado reinventar el oficio periodístico para mantener informada a la población ante el apagón informativo que vive Nicaragua, donde la propaganda de la dictadura se impone.

Algunos hallazgos

El estudio tiene como fundamento una encuesta aplicada a 112 periodistas que viven el exilo principalmente en Costa Rica (41%) y Estados Unidos (41%) y España (12%).

Sobre su situación migratoria, la encuesta revela que, entre las personas que han solicitado refugio, solo el 44.6% ha logrado conseguir ese estatus, mientras que el 38.4% está a la espera de una resolución sobre su solicitud.

En lo que respecta a lo laboral, el 99% de las personas consultadas, aseguró que se encontraban ejerciendo el oficio periodístico o tareas vinculadas a este en Nicaragua, antes de verse obligados a salir hacia el exilio.

No obstante, una vez en el exilo, han tenido que insertarse laboralmente en otras áreas y oficios fuera de su profesión, principalmente en hostelería, turismo, transporte, construcción y zonas francas, e incluso servicios domésticos, entre otros. También destacan quienes han incursionado en emprendimientos.

Se resisten a abandonar el periodismo

El diagnóstico destaca que los hombres y mujeres de la comunicación social en el exilo, pese a que han incursionado en otras áreas para poder subsistir, se resisten a abandonar su labor y compromiso social de ejercer el periodismo, pese a los paupérrimos salarios, incluso algunos refirieron que lo hacen sin recibir ninguna remuneración.

Otro aspecto relacionado a la subsistencia que revela el estudio, es que el 87% tiene personas que dependen de ellos económicamente, (cónyuge, hijos, hijas, madre, padre, hermanos y sobrinos, entre otros parientes). En este sentido revelaron que en algunos casos estos parientes se encuentran con ellos en el exilo, pero en otros casos les envían remesas a Nicaragua.

Afectaciones en su salud física y emocional

El diagnóstico situacional de las y los periodistas en el exilio revela que el 64%, tiene su salud física afectada con diversos padecimientos que van desde enfermedades crónicas cardiovasculares, neurológicas, diabetes y afecciones respiratorias.

En lo que respecta a la salud emocional resaltan padecimientos como la ansiedad generalizada, trastornos del sueño, depresión, estrés crónico, entre otros.

Percepción de inseguridad agobia a periodistas

A raíz del asesinato de exmilitar en retiro Roberto Samcam, férreo crítico de la dictadura Ortega Murillo, perpetrado por sicarios en San José de Costa Rica, el pasado 29 de junio, la percepción de inseguridad de las personas comunicadoras se ha acrecentado, revela el diagnostico.

El estudio asevera que por tal razón existe temor de continuar ejerciendo el periodismo desde el exilio, pero además debido a represalias en contra de sus familiares que aún permanecen en Nicaragua, dad la existencia de redes de vigilancia transfronteriza y ataques digitales a sus cuentas, entre otras razones.

Otro aspecto que resalta del diagnóstico, es el que tiene que ver con el ejercicio periodístico desde el ámbito de los recursos tecnológicos. El informe asevera que  las personas periodistas enfrentan obstáculos de orden técnico para desarrollar sus labores, ante la falta de recursos y equipos tecnológicos.

También destaca que cada vez hay menos acceso a fuentes confiables y dispuestas a dar declaraciones, incluso de forma anónima tanto dentro como fuera de Nicaragua.

No obstante, el 85% de las personas periodistas en el exilio que respondieron la encuesta indicaron que quieren seguir ejerciendo el periodismo a largo plazo, lo que deja en evidencia el compromiso de estos hombres y mujeres por seguir informando y denunciando las sistemáticas violaciones de derechos humanos que ejecuta la oprobiosa dictadura Ortega Murillo.