Contundente homilía de Obispo Silvio Báez desde el exilio
- 29 Dic 2025
- 2:44 p.m.
La reprimenda enviada desde el exilio por el obispo auxiliar de Managua Silvio Báez a los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo, durante una homilía celebrada el domingo 28 de diciembre en la parroquia Santa Agatha de Miami, fue contundente. Báez acusó a la pareja dictadora de “afinar diabólicamente el método de Herodes” al condenar al exilio a miles de nicaragüenses e impedir el retorno al país de otros miles.
“Pienso en mi país, Nicaragua, en donde la dictadura ha afinado diabólicamente el antiguo método de Herodes. No se limitan a forzar al exilio a ciudadanos honestos e inocentes, sino que también le prohíben el ingreso a su propio país, les confiscan sus bienes y amenazan y hostigan a sus familiares”, dijo el religioso ante su feligresía.
Báez, quien ha sido portador de una voz firme y crítica contra el régimen opresor Ortega-Murillo, fue expulsado del país en 2019 y después desnacionalizado, pese a ello, el obispo auxiliar de Managua, continua desde su exilio alzando su voz para denunciar a la dictadura y abogar por la libertad de Nicaragua.
El obispo nicaragüense, advirtió que la represión de la dictadura no termina con la expulsión del país de las personas disidentes, pues esta continúa más allá de las fronteras, dado que el régimen vigila y persigue a opositores que se encuentran en el exterior, pero además les cercena el derecho a su nacionalidad al negarle servicios consulares y la renovación de sus pasaportes, condenándolas a una apatridia de facto.
“Espían a los exiliados, les niegan los servicios consulares o dejan a miles de personas en la grave condición de apátridas de hecho al no renovarles el pasaporte. Incluso a muchos nos han privado intencional y arbitrariamente de nuestra nacionalidad, como parte de un plan sistemático de represión institucionalizada”, afirmó Báez durante su homilía dominical celebrada en conmemoración de la Sagrada Familia.
Asimismo animó a la comunidad nicaragüense en el exilio a no abandonar la esperanza ni la lucha cívica. También les exhortó a preservar su dignidad, respetar las leyes de los países que los reciben y mantener la solidaridad entre comunidades desplazadas.
Báez además condenó las violaciones de los derechos humanos cometidas por las dictaduras de Cuba y Venezuela, países donde también millones de personas se han visto obligadas a abandonar su tierra dada la represión y la situación económica en que estas dictaduras tienen sumida a su población.