Cautela aumenta en actividades de la Iglesia católica

En las familias católicas nicaragüenses existe mucho desconcierto en cuanto a la situación de la Iglesia Católica ya que según un poblador de Bluefields, se percibe un profundo estrés y cautela en cada una de las actividades. 

“Ya las misas no son lo mismo, los sacerdotes están cuidando lo que dicen, las actividades se limitan al patio de la iglesia y las procesiones ya ni se conocen aquí, y en todo el país. Yo digo ahora que hay un silencio de fe y es entendible, nadie quiere que lo manden tan largo de su casa por muy religioso que sea. La feligresía está muy asustada y cansada”, apuntó. 

Agregó que ninguna celebración religiosa será igual a la de años anteriores, “ni por muy importante que sea. Celebramos a  la patrona de Bluefields ( Nuestra Señora del Rosario) y no se vio ninguna alegría comparada a los años anteriores”, lamentó. 

Ante la incertidumbre, muchas familias temen visitar las iglesias, ya que consideran que dentro de los mismos templos está “Judas”, en relación a los partidarios sandinistas que forman parte de los grupos católicos para obtener información de todas las actividades. 

Estrategia gubernamental atenta contra las libertades y derechos 

Para la abogada e investigadora Martha Patricia Molina, en Nicaragua se lleva a cabo una estrategia de desmantelamiento de libertades y derechos que incluye el destierro de cualquier religioso crítico de la situación de Nicaragua.

“La dictadura agrede a las personas que manifiesten su fe, porque lo que ellos están buscando es personas pastores y sacerdotes que sean “compinches”, que sean cómplices y bendigan todas las vulneraciones a derechos que ellos cometen a diario”, consideró Molina. 

En tanto, Yader Valdivia, abogado del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más aseguró que lo que la población está viendo es una restricción a la libertad religiosa. “Esto hoy en día se ha criminalizado, y me refiero a criminalización, porque hoy en día está prohibido realizar una actividad juvenil donde se unan diferentes pastorales, sin que el régimen ponga en riesgo la seguridad de estos jóvenes”, explicó. 

Añadió que dentro de los derechos violados a la población nicaragüense, no solo está la libertad de religión, “esta es solo uno entre la infinidad de violaciones a los derechos humanos, que están contemplados en la Constitución Política”, destacó.