Daniel Ortega destaca “logros” en salud en acto del 41 aniversario del 19 de julio
- 19 Jul 2020
- 8:20 p.m.
- Managua
Después de más de 30 días en estricta cuarentena, el dictador Daniel Ortega reapareció en el acto central del 41 aniversario del 19 de julio. Ortega llegó con un tapaboca, que luego se quitó para dirigir su mensaje ante un grupo de jóvenes de la Juventud Sandinista, quienes fueron colocados en círculo, alrededor de una estrella, el nuevo símbolo esotérico de Rosario Murillo. El mensaje de Ortega fue transmitido en cadena nacional de Radio y Televisión.
El acto fue presidido además por: Rosario Murillo -esposa de Daniel Ortega y vicepresidenta de Nicaragua-, Julio César Avilés -jefe del Ejército de Nicaragua-, Francisco Díaz -Director General de la Policía-, Gustavo Porras -presidente de la Asamblea Nacional-, Iván Acosta -Ministro de Hacienda y Crédito Público-, Martha Reyes -Ministra de Salud- y Sonia Castro, asesora de Ortega para temas de salud. Edwin Castro, jefe de la Bancada Sandinista y el Comisionado Ramón Avellán, subdirector de la Policía no fueron mencionados por Ortega y tampoco captados por las cámaras de la televisión oficialista. No se mencionó representación del Poder Judicial y del Consejo Supremo Electoral, como ha ocurrido en años anteriores. Este año, no hubo presencia de sacerdotes y pastores en la tarima.
Ortega dijo que conmemoraba el 41 aniversario bajo una serie de medidas para proteger la vida, frente a una epidemia que ha sorprendido a los países desarrollados. No obstante, olvidó una medida personal al despojarse del cubrebocas al hablar.
Dedicó casi todo su mensaje para afirmar que la infraestructura de salud que su “gobierno” ha instalado es lo que le permitido a Nicaragua salir adelante ante la pandemia del coronavirus.
Daniel Ortega dijo que, en el periodo del 11 de marzo al 30 de junio de 2020, un total de 12,100 nicaragüenses han muerto por diversas enfermedades, incluyendo 91 a causa del coronavirus. De estos 7,349 varones y 4,751 mujeres. Según los datos presentados por Daniel Ortega, en este período la neumonía ha sido la principal causa de defunción con 2,344, seguido de Infarto Agudo de Miocardio con 1908, diabetes mellitus 1425, enfermedades hipertensivas 890, tumores malignos 853, enfermedades renales crónicas 659, accidentes cerebrovasculares 439 fallecidos, enfermedad pulmonar obstructiva crónica 373, insuficiencia hepática 334, accidentes de tránsito 242.
“En el caso de este COVID, que le llaman COVID-19, hasta el 30 de junio teníamos 83, casos confirmados habían 2182, casos recuperados 1750, casos en seguimiento responsable y cuidadoso 349 y defunciones 83, ahora ya tenemos 91”. Pese a dedicar la mayor parte del tiempo a hablar de la salud, Ortega no dio detalles de las afectaciones de la COVID-19 al personal de salud.
Según Ortega, en Nicaragua se han construido 19 hospitales: Dos nacionales, uno departamental y 16 primarios, 18 centros de salud, 452 puestos de salud 128 casas maternas, un instituto de medicina natural y 15 filiales de dicho instituto, 188 clínicas de medicina natural y terapias complementarias y está en construcción siete nuevos hospitales, un laboratorio epidemiológico regional y una casa materna. Para ortega, esta inversión en infraestructura de salud explica la capacidad para atender a la población.
Ortega también se refirió a los nicaragüenses varados en otros países que quieren volver a Nicaragua. “Abrimos las puertas, pero con las debidas medidas que hay que tomar, han estado entrando de diferentes países”, dijo Ortega. Añadió que han establecido un mecanismo con Costa Rica para que el tránsito por ese país sea ordenado. “Han entrado de manera ordenada, no es cuestión que van a entrar de manera desordenada a contaminar a la comunidad, por eso es importante que vengan con su certificado”, dijo Ortega. Sin embargo, no dijo anda con relación al cobro de 150 dólares que hace el Ministerio de Salud por la prueba de COVID-19 para personas nicaragüenses que deben viajar y que necesiten un certificado negativo de COVID-19.
Esta vez, Daniel Ortega no suplicó a Estados Unidos, el cese de las sanciones impuestas a varios de sus funcionarios y a su esposa Rosario Murillo y a sus hijos Laureano, Rafael y Juan Carlos Ortega Murillo.