Maltrato animal en desfile de Los Agüizotes

Un zopilote crucificado recorrió las calles de Masaya durante la celebración del tradicional desfile de Los Agüizotes el pasado 25 de octubre. Las personas que exhibieron el ave lo rociaron de algún combustible y le prendieron fuego.

La foto del animal calcinado fue publicada en redes sociales. Un ecólogo e investigador de las aves en Nicaragua, calificó el acto como “salvajismo”.

El experto señaló que la especie de zopilote cruelmente asesinado es Coragyps atratus, conocido como zopilote de cabeza negra, muy común en la zona del Pacífico de Nicaragua.

El especialista explicó que este zopilote se encarga de eliminar los restos de animales muertos por lo que cumple un papel muy importante, al mantener limpio el ecosistema de cadáveres que puede provocar enfermedades epidémicas.

Los zopilotes son aves carroñeras es decir, se alimentan de cadáveres y por eso se les considera los “limpiadores de la naturaleza”.

Una persona que asistió a Los Aguizotes afirmó que observó al menos 10 zopilotes siendo utilizados como adornos durante el desfile, uno de los animales estaba vivo “con las alas quebradas mientras algunas personas le tomaban fotos”.

“Estos tipos de actos se deben a que las personas no son sensibles y no respetan la vida de los animales”, manifestó el experto en aves.

A su criterio, el uso de los animales en este tipo de festejos no tiene nada que ver con la cultura y las tradiciones. “Las autoridades deben de prohibir el uso de cualquier animal y más cuando es expuesto a tratos crueles como el que vimos en Los Agüizotes”.

Los Agüizotes es una festividad en honor a San Jerónimo, el patrón de Masaya. Es un desfile donde las personas asisten disfrazadas de diferentes mitos y leyendas de Nicaragua. Sin embargo, en los últimos años, los disfraces hacen referencias a espantos y personajes del cine de terror, alejándose de la original tradición.

Ley de protección animal sigue sin efecto

No es la primera vez que personas que participan en Los Agüizotes exhiben evidencias de tortura animal. En los últimos años ha sido una práctica recurrente. En 2017, usuarios en redes sociales denunciaron un acto parecido. En otras ocasiones se han utilizado cabezas de cerdos, monos y gallinas.

La ley 747, Ley de Protección y Bienestar de los Animales Domésticos y Animales Silvestres Domesticados en Nicaragua, fue aprobada en el 2012, sin embargo, sigue sin ser reglamentada, por ello, no se puede aplicar en la práctica y las personas que cometan actos de crueldad contra los animales no son sancionadas.

La Ley tampoco establece cárcel por cometer actos como los ocurridos con el zopilote. Pero el artículo 391 del Código Penal de Nicaragua establece de 50 a 200 días de multa a quien "someta a daños físicos, castigos y trabajo excesivo que lleven a un animal a la muerte o a padecer daños en su salud o estrés".

De igual forma, impone penas de cárcel de entre tres y seis meses para quien realice "espectáculos violentos públicos o privados entre animales, y de seis meses a dos años de cárcel si estos son con ánimos de lucro".

El zopilote negro es conocido como el buitre americano porque se reporta de Norteamérica hasta Chile. No es una especie en peligro de extinción, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.