El sentir ciudadano en las calles y los muros de Nicaragua
- 23 Ago 2018
- 12:24 p.m.
- Managua
Las pintas, graffiti, stencil y dibujos, adornan el espacio público en varias ciudades. La creatividad popular está presente en la Nicaragua insurrecta. Muros y paredes de casas, universidades y establecimientos públicos recogen el sentir de las y los nicas. Es otro de los medios alternativos donde la ciudadanía expresa sus inconformidades.
Los muros del puente a desnivel cercano a la Colonia Centroamérica tienen plasmada la voluntad popular de cambio demandada desde el 18 de abril de 2018.
En uno de los extremos resalta la frase “¿Qué sos sino un triangulito de tierra perdido en la mitad del mundo?... ¿Qué sos Nicaragua, para dolerme tanto” del poema ¿Qué sos Nicaragua? de la nicaragüenses Gioconda Belli.
Organismos de derechos humanos contabilizan a la fecha casi cuatrocientas personas asesinadas. La mayoría, jóvenes.
Las reflexiones breves en los muros son las voces de quienes se encuentran en las celdas de El Chipote. Brandon Lovo Tayler y Glen Abraham Slate permanecen ahí desde hace cuatro meses, acusados de disparar contra el periodista Ángel Gahona, de Bluefields. La familia de Gahona niega que sean los verdaderos culpables.
Irlanda Jerez, comerciante del Mercado Oriental, Medardo Mairena, Pedro Mena y Víctor Díaz, del Movimiento Campesino Anticanal, son parte de los 320 reos políticos que registra el Centro Nicaragüenses de Derechos Humanos.
El grito de justicia y libertad es también por todas las personas asesinadas, secuestrados, desaparecidos, encarcelados y por quienes andan huyendo, por haber protestado por un cambio.
A Gerald Vásquez, lo asesinaron dentro de la iglesia Divina Misericordia durante el ataque en la UNAN-Managua. El viernes 13 de julio recibió un disparo que acabó con sus sueños. En las calles se le rinde homenaje.
En las marchas es infaltable el azul y blanco de la bandera nacional. En los primeros 100 días, la ciudadanía reivindicó su derecho a seguir exigiendo cambios en el sistema político del país.
Si usted es de los que hace uso de su derecho a la libre movilización pese a la inseguridad, seguramente ya se habrá encontrado con esta pinta.
Los mensajes a la Policía Nacional son infaltables. La ciudadanía deja claro su descontento y rechazo hacia la institución que se supone debe velar por la seguridad de las personas.
También recuerdan la denuncia de violencia sexual que hizo Zoilamérica.
Las expresiones populares nutren la indignación. La respuesta al baile y la canción “El Comandante se queda”, fue “pero en la cárcel modelo”, en una de las pintas callejeras.
Colorean la ciudad las pintas contestarías. En esta imagen se responde a la Rosario Murillo por su calificativo de llamar “Plaga” a quienes se oponen a su gobierno.
Como la libertad de expresión está amenazada en Nicaragua, las alternativas son seguir reivindicando la lucha de quienes murieron por cambiar el país.
El arte callejero es político.
La ciudadanía ha dejado claro que no hay perdón ni olvido, que la justicia tendrá que llegar.
La gente en la calle lo tiene claro, no se logra la paz sin justicia.