Solicitante de refugio narra cómo es vivir sin resolución migratoria

Génesis Lara Corea, de 26 años, es una migrante nicaragüense que solicitó refugio en Costa Rica en agosto de 2018, a cinco años de ese trámite su caso aún no ha sido resuelto.

“Yo decidí moverme a Costa Rica donde soy solicitante de refugio. Ingresé mi solicitud en octubre de 2018, y en julio 2021 pase mi entrevista de miedo creíble pero a la fecha no he tenido respuesta”, indicó.

Lara es una de los 222,576 nicaragüenses que solicitaron refugio en Costa Rica entre  2018 y octubre de 2023. Mencionó que ha enviado correos a la Dirección de Migración y Extranjería de Costa Rica (DGME), pero siempre le dicen que su caso “está pendiente”.

Agregó que ha visitado en tres ocasiones las oficinas de la DGME, pero siempre  le dicen: “espere la resolución que aún está pendiente, hay 90 personas delante de usted”, lamentó. 

Lara contó que  a su mejor amiga también de origen nicaragüense, Costa Rica le negó el refugio. “A mí realmente no me han dado resolución, pero a mi mejor amiga si se lo negaron (el refugio) y la posibilidad que le brindaron fue sacar el estatus (de Categoría Especial Temporal) lo cual le permitía vivir dos años de forma legal con posibilidad de regresar a Nicaragua de visita”, destacó.

Señaló además, que una de las limitantes de estar en un limbo migratorio es que las empresas costarricenses a la hora contratar personas prefieren a las “que tengan un estatus seguro, o permanente”. Insiste que para ella es complejo no saber cuándo le van a dar una respuesta.

Comportamiento de las solicitudes de refugio

De acuerdo a cifras de la Unidad de Datos de la DGME desde el 2018 las solicitudes de refugio de nicaragüenses “se han incrementado anualmente en forma paulatina”.

En 2018, solicitaron refugio 21,128 connacionales, para 2019 la cifra aumentó a 31,614 nicaragüenses reclamaron su estatus, en 2020 (por la pandemia del Covid-19) la cifra descendió significativamente con solo 9,416 nicaragüenses.

Pero un año después, en 2021 esa cifra se disparó con 52,929 casos y en 2022, alcanzó los 80,028. Finalmente entre enero  y octubre de este año la cifra sufrió un descenso al llegar a 25,451.

De los 25,451 casos solo 2,350 han obtenido su resolución, de esas 1,767 como aprobadas y 583 denegadas. Los meses donde más respuestas positivas brindaron fueron en febrero, marzo y abril con 566, 219 y 285, respectivamente.