Condiciones laborales en las maquilas, afectan salud de las mujeres

Anualmente el Movimiento de Mujeres María Elena Cuadra (MEC), realiza el Coloquio de mujeres trabajadoras y desempleadas, y este año no fue la a excepción, ya que este domingo se llevó a cabo la edición número 23 de este evento; que tuvo como principal objetivo, enfocarse en la denuncia de la misoginia y todas las formas de violencia contra las mujeres.

Unas 600 mujeres se dieron cita este 14 de marzo de 2021, para participar de esta actividad anual, que además se realiza en el marco de las conmemoraciones del ocho de marzo, Día Internacional de la Mujer.  

Durante la inauguración del evento, Sandra Ramos, directora de la organización defensora de las mujeres trabajadoras y desempleadas, mencionó que todos los años el MEC realiza una reflexión interna con las mujeres obreras de las zonas franca, para analizar cómo marcha la situación de sus derechos. “Si vamos retrocediendo o vamos avanzando”, menciona. Según Ramos, en esta jornada, las mujeres discuten “todos sus problemas” y hacen sus propuestas para la solución a esos problemas.

Este año, el Coloquio enfocó su análisis en el abordaje de las violencias que enfrentan las mujeres trabajadoras. “El día de hoy hay 600 mujeres reunidas para discutir su situación en un entorno que es mucho más grande que es el análisis de todas las violencias de género que se ejercen en contra de las mujeres. No solamente en el ámbito laboral, sino en el ámbito de la comunidad, en el ámbito de la familia, en el hogar, y también nos trasladamos al terreno de la fábrica y el cumplimiento del gobierno sobre el cumplimiento de nuestros derechos”, apunto Ramos.

Por encargo del Movimiento María Elena Cuadra, un grupo de expertas elaboró un diagnóstico, el cual contó con el acompañamiento de La Universidad Politécnica de Nicaragua (UPOLI). El estudio, a bese de testimonios, corroboró información sobre los impactos que tiene el trabajo de la maquila en la estructura musculoesquelética de las mujeres. De modo que prevalecen una serie de trastornos en la población trabajadora de la maquila, producto de las largas y continuas horas de “trabajo repetitivo”, donde las mujeres deben mantenerse en posturas inadecuadas, que, a largo plazo, afectan la columna, huesos de las manos (síndrome túnel carpiano) y piernas. Estas afectaciones a mediano plazo deforman el cuerpo de las mujeres y las inhabilita para desempeñar su trabajo en la maquila. Esto implica que las mujeres queden en desempleo cuando aún son muy jóvenes.

“Los cuerpos de las mujeres quedan prácticamente lisiadas de por vida”, afirmó Sandra Ramos, por tanto, para esta edición 23 del Coloquio se montó una galería fotográfica denominada “Sobrevivir a la maquila”, donde se presenta un compendio de historias de mujeres con trastornos musculoesqueléticos, quienes muestran las secuelas físicas que durante su vida como trabajadoras de las maquilas han sufrido.

Hasta lo que va del año 2021, en Nicaragua existen 192 empresas textiles adscritas al régimen de zonas francas, ubicadas principalmente en los municipios de Managua, Tipitapa, Ciudad Sandino y Carazo. Estas empresas emplean a más de 140 mil trabajadoras.

Desde su fundación en 1994 (27 años) el MMEC, ha denunciado a los gobiernos de Nicaragua, los cuales ofertan ante las transnacionales, a las mujeres trabajadoras de la maquila como mano de obra barata. Pero las mujeres lo único que han obtenido en estas industrias manufactureras, son empleos precarios. “Hablando con algunos empresarios (de zonas francas) estos dicen que su función es sacar del desempleo y la miseria a las mujeres... Pero ellos, los empresarios, no están dispuestos a compartir sus ganancias, sus utilidades en mejorar condiciones de vida de las mujeres. Y esto ha impedido que las mujeres puedan gozar de sus derechos”, sostuvo Ramos.