Tras última visita, familiares denunciaron “peores condiciones” para personas encarceladas políticas

La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo mantiene a más de 190 personas presas por motivos políticos, de acuerdo con el informe del Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas. Treintaicuatro de estas personas están detenidas en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial, conocido como El Nuevo Chipote, en donde sus derechos como personas privadas de libertad son violentados.

Este fin de semana el régimen autorizó la décima visita a las presas y presos políticos recluidos en El Chipote, en donde sus familiares pudieron constatar que continúan perdiendo peso debido a la reducción en la cantidad de alimentos que reciben, y se confirmó que continúan sin atención médica especializada y sometidos a extensos interrogatorios.

Pero las torturas del régimen no solo violan los derechos de las y los presos políticos, sino también los derechos de hijas e hijos, que en más de quince meses de cárcel no han podido visitar o tener alguna comunicación con sus madres y padres, así lo han señalado reporte de defensores de derechos humanos y familiares de las y los reos políticos.

Las presas y presos políticos que han sido sometidos al aislamiento e incomunicación con sus hijas e hijos son: el periodista y cronista deportivo Miguel Mendoza, la opositora y presidenta de la Unión Democrática Renovadora (UNAMOS), Suyén Barahona, el politólogo José Antonio Peraza, el abogado Roger Reyes, y el exaspirante a la presidencia Félix Maradiaga.

La abogada María Oviedo, el empresario Luis Rivas Anduray, el líder campesino Medardo Mairena, y los extrabajadores de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, Walter Gómez y Marcos Fletes tampoco han podido ver a sus hijos e hijas, pese a que lo han demandado de distintas oportunidades.

Del grupo de personas encarceladas políticas, únicamente Tamara Dávila y Miguel Mora, se les ha permitido ser visitados por sus hijos aparentemente tras la presión ejercida por ellos mismos, al haber iniciado una huelga de hambre. Tanto Tamara como Miguel Mora, pudieron ver a su hija e hijo, respectivamente el pasado 20 de agosto.   

Mientras tanto, familiares del periodista y cronista deportivo Miguel Mendoza, informaron que después de más de 30 días sin tener información sobre él, este sábado 27 de agosto pudieron constatar su estado de salud y los atropellos a sus derechos humanos.

La familia señaló la manera humillante en la que son tratados al ingresar a la visita. “Como ha sucedido en visitas anteriores, es humillante la manera en la que requisan a los familiares antes de ingresar. Los agreden sexualmente, la justificación que dan es que una "orientación" o que "por uno las pagan todos".

También compartieron que en esta oportunidad la visita fue en un pequeño salón, sin ventilación y con dos cámaras de seguridad. Según describieron, la situación se tornó incómoda y desagradable por el acoso de los fotógrafos y camarógrafos que es exagerado. “Obligan a posar con y sin mascarillas, de pie y sentados y graban cada muestra de afecto” denunciaron.

Pero lo más preocupante es el estado de salud de Mendoza. Según familiares lo vieron aún más delgado que las otras veces. “Esto se debe a que les redujeron las porciones de comida y la preparación de los alimentos es pésima, por lo que a veces no come”, relataron. “También siente mucho dolor en su pie izquierdo, lo aduce al ácido úrico, puesto a que el supuesto médico que lo ve, no ha podido dar un diagnóstico basado en exámenes clínicos”.

Miguel Mendoza es uno de los 10 presos políticos a quien se le continúa negando el derecho de ver a su hija de 8 años. Justo hace una semana familiares y amistades empezaron a promover una campaña en apoyo a la hija de Miguel Mendoza que, con ocho años, solicita reencontrarse con su papá, a más de un año de no verlo.

El abogado defensor de Miguel Mendoza ha hecho llegar a las instancias correspondientes 11 solicitudes y hasta la fecha ninguna ha tenido respuesta.

Denuncian mala alimentación y falta de atención médica

En conferencia de prensa familiares de las y los presos políticos después de asistir a las visitas autorizadas entre el 26 y 28 de agosto, denunciaron la drástica reducción de alimentos y la falta de atención médica.

Según Cesar Dubois, esposo de Suyén Barahona, el régimen está implementando una política de hambre. “Después de la última visita que fue el 24 de julio, hubo reducción de los alimentos, les dan arroz y frijoles pero muy pequeñas cantidades, nuestros familiares pierden de cuatro a siete libras en un mes”.

La falta de atención médica también alarma a familiares, como es el caso de Juan Lorenzo Chamorro. Sus familiares informaron que tiene una hernia y que le dificulta caminar, le falta la respiración y se le observa desgastado.

En el caso de Lesther Alemán, se ha demandado que un médico independiente pueda ingresar al Chipote a atenderlo, ya que continúa con serios problemas médicos en su pierna derecha y padeciendo de taquicardia y migraña.

La presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH) Vilma Núñez, acusó a la dictadura de usar Estrategia de la tortura para presionar física y emocionalmente a las y los presos políticos “El afán del régimen es exterminarlos”, manifestó Núñez.  

En lo que parece ser una respuesta a las declaraciones de familiares, tras la visita del fin de semana a las y los presos políticos, medios oficialistas publicaron este martes una serie de fotografías en donde se puede observar a algunos de los presos políticos. Aún se desconoce la fecha en fueron tomadas dichas imágenes.  

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