Dos adolescentes víctimas de feminicidio en Nicaragua

Dos adolescentes, una de 16 años y la otra de 14, fueron víctimas de feminicidio en Nicaragua, el sábado 20 de abril de 2024. 

La adolescente de 16 años fue encontrada sin vida y con evidencia de disparos de arma de fuego en su cuerpo, en Plan de Grama, Wiwilí de Jinotega. Según medios de comunicación locales, el hallazgo del cuerpo ocurrió la tarde del domingo 21 de abril en una zona conocida como Las Quebradas. 

La información que recaban los medios de comunicación locales es que la adolescente salió de su casa rumbo al colegio el sábado 20 de abril, sin embargo no regresó. La otra adolescente de 14 años, fue encontrada sin vida y con heridas de cuchillo en su cuerpo, en la comunidad El Coco, en el municipio de la Cruz del Río Grande, Región Autónoma de la Costa Caribe Sur (RACCS).

Hasta ahora, la policía orteguista, no ha dado información más amplia de ambos feminicidios. De acuerdo con la organización Católicas por el Derecho a Decidir, hasta el 18 de abril, 24 mujeres nicaragüenses habían sido asesinadas, incluyendo dos en el extranjero. Con las dos adolescentes, la cifra de víctimas de feminicidio se eleva a 26. 

Mujeres vulnerables en la zona rural

El Grupo Venancias, afirma que, “seguimos siendo testigos de una matanza contra mujeres de todas las edades, y está claro que las que viven en zonas rurales están más vulnerables a ser víctimas de la violencia machista”. 

“Nos queda demandar que haya prevención para evitar más víctimas y que se capture y juzgue a quienes han sido perpetradores de la violencia para que paguen por su crimen”.

De igual forma pide a la población a no echar la culpa a la víctima o la familia de las víctimas, por una agresión. “Hacemos un llamado para enfocar la atención en el agresor, o agresores, que son quienes arrebataron la vida de esta chavala. Es muy difícil que una madre o padre de familia tengan la capacidad de acompañar a sus hijas las 24 horas, por eso pedimos que paren los mensajes que juzgan a sus familiares cercanos por no haberla cuidado”. 

Por su parte, María Teresa Blandón, feminista y defensora de los derechos de las mujeres, afirma que en algunos casos, las mujeres son más vulnerable a la violencia machista en la zona rural. 

“En las zonas rurales más alejadas hay más pobreza, hay más analfabetismo, precariedad, menos información, menos instituciones del Estado. Las niñas y las mujeres están a merced del machismo y de los agresores porque tienen menos recursos para protegerse”.

Blando destacó que, en las zonas rurales,  no hay un lugar donde las mujeres se puedan ir a resguardar. “No hay organizaciones que puedan ayudar a las víctimas. Todo eso contribuye a aumentar la vulnerabilidad”. 

Es importante destacar que, con el cierre de organizaciones, la dictadura de Daniel Ortega ha desmantelado las redes de apoyo y las casas de albergue para mujeres víctimas de violencia.