Comunidad caribeña exiliada desconoce autoridades regionales en Nicaragua

Por haber surgido de manera ilegítima por medio de una farsa electoral en la que predominó un abstencionismo del 85 por ciento, la Coordinadora de los Pueblos Indígenas de la Costa Caribe de Nicaragua en el exilio, emitió un pronunciamiento en el que desconoce a las nuevas autoridades regionales que asumieron sus cargos este sábado 4 de mayo.

El pronunciamiento emitido en la víspera, refiere que este 4 de mayo “se instalará el nuevo consejo y gobierno regional de la Costa Atlántica de Nicaragua, producto de la elección regional del 3 de marzo del presente año. Esta elección fue cuestionada y es fraudulenta porque hicieron la farsa de una elección democrática, participativa con un 85% de abstencionismo”.

La Coordinadora también recordó que la dictadura Ortega Murillo no permitió la participación de YATAMA, el único partido político indígena al que el régimen despojó de su personería jurídica y encarceló a sus líderes, Brooklyn Rivera Bryan y Nancy Elizabeth Henríquez James.

“No hubo campaña abierta, no hubo participación de los verdaderos líderes indígenas comunales y territoriales. Los candidatos no fueron seleccionados de la base, fueron asignados a los intereses del Frente Sandinista para tener el control absoluto sobre la vida de la Costa Atlántica de Nicaragua” denuncia la organización indígena en su pronunciamiento.

La coordinadora está integrada por lideres y lideresas indígenas de los pueblos Misquito, Mayagna, Rama y Creole.

Instalación de nuevas autoridades es “una bofetada a los pueblos indígenas”

El liderazgo indígena en el exilio que suscribió el pronunciamiento advierte que en la Costa Caribe de Nicaragua “no existe una alternativa política autónoma para que los costeños puedan fortalecer su autonomía, libre determinación, como la establece el fallo de la Corte Interamericana del año 2005 a favor de YATAMA contra el Estado de Nicaragua”, asimismo añade que tal situación es además de una gran frustración, una violación a los derechos de libre determinación de los pueblos indígenas.

“Con la instalación de las nuevas autoridades electas por solamente un 15% de los habitantes costeños, es una bofetada a los pueblos indígenas y afrodescendientes por lo demandamos y exigimos respeto a la libre determinación” reafirma el pronunciamiento indígena.

De igual forma, reitera que “desconocemos a esas autoridades ilegítimas porque no existe ninguna garantía de que los derechos de los pueblos indígenas y afrodescendientes vayan a ser respetados y defendidos, por el contrario, seguirán los colonos apropiándose e invadiendo nuestros territorios, deforestando y dando las concesiones mineras, pesqueras y forestales en detrimento de la vida de los pueblos y acrecentando más pobreza y la violación de los derechos humanos”.

Finalmente, también hace referencia a los “supuestos lideres indígenas” que a nivel nacional e internacional predican su liderazgo, “pero que son los cómplices de las múltiples violaciones, atropellos cometidos con los pueblos indígenas de manera sistemática desde la Navidad Roja”.

La navidad roja se le llamó a una operación ejecutada por el ejército sandinista a inicio de la década de los 80, la que consistió en el traslado forzado de 42 comunidades indígenas misquitas, asentadas principalmente en las riberas del Rio Coco, fronterizo con Honduras. Durante la sangrienta operación al menos 60 indígenas fueron masacrados por el ejército, según reportes de organismos de derechos humanos.

También INANA-IAP

La Plataforma de Pueblos Indígenas y Afrodescendientes de Nicaragua (Inana-IAP), en consonancia con la Coordinadora de los Pueblos Indígenas de la Costa Caribe de Nicaragua en el exilio, también emitió un comunicado en el que rechaza y desconoce el acto de juramentación de las autoridades regionales.

INANA IAP, aduce las mismas razones, afirmando que las nuevas autoridades “son producto de la farsa electoral, del régimen criminal sandinista de los Ortega Murillo desarrollada a través del cooptado Consejo Supremo Electoral, con el apoyo de las fuerzas armadas y de todo su aparato institucional, en las pasadas elecciones regionales de la Costa Caribe de Nicaragua el 3 de marzo del 2024”.

La organización exhorta a la comunidad internacional a desconocer el acto de juramentación y las mismas elecciones regionales y a tomar acciones contundentes contra el régimen Ortega Murillo que permitan el cese de la violencia contra los pueblos indígenas.

De igual forma exige el respeto a los derechos individuales y colectivos de los pueblos indígenas y afrodescendientes de la Costa Caribe Nicaragüense.

Opresión contra pueblos indígenas es política de Estado

Desde su retorno al poder en 2007, el régimen de Daniel Ortega ha extendido sus garras hacia la costa Caribe, para explotar indiscriminadamente sus recursos naturales, otorgando concesiones mineras, sepultando la autonomía costeña respaldada en las leyes nacionales, creando gobiernos comunales paralelos y poniendo al frente de los gobiernos y consejos regionales como autoridades a sus fieles allegados.

El régimen también ha permitido, a lo largo de la última década, la invasión de terceros colonos para que despojen a las comunidades indígenas de sus tierras, lo que ha dejado al menos 70 indígenas mayagnas y miskitos asesinados. Todo con total impunidad.