¡Repartición de tierra!
- 31 Jul 2018
- 4:08 p.m.
- Managua
Cual piñata, el régimen Ortega-Murillo ha comenzado a repartir tierras para atraer a quienes dicen que no tienen, sin tomar en cuenta el perjuicio que se hace a la dignidad de las personas y donde ha habido golpes, robos e intimidación. Pragmatismo puro y duro.
No debe olvidarse que en Nicaragua, las tres cuartas parte de las viviendas son inadecuadas por la falta de acceso a servicios básicos, de acuerdo el Banco Interamericano de Desarrollo, BID, y a un estudio de Hábitat para la Humanidad. Aunque la Ley Especial para el Fomento de la Vivienda manda a crear un Banco Nacional de Tierras.
La Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (UPANIC), ha actualizado la cantidad de manzanas de tierras tomadas. Hasta el 31 de julio UPANIC recibió 37 denuncias por invasión, unas 7,358.5 manzanas, de las cuales un 22% han sido recuperadas por sus propietarios. Dicha entidad ha manifestado públicamente que la mitad de las tierras tomadas son agrícolas; y que más de la tercera parte son de uso pecuario.
Se ha alentado la toma de tierras, en medio de la crisis sociopolítica que vive la población, aumentando la intranquilidad. Se dice en muchos casos que es por necesidad, pero también se conocen a familias enteras que han encontrado en ello, una forma de vivir.
No importa la procedencia de las tierras ni de sus dueños. En la zona de Tisma, por ejemplo, se conoce la toma de tierras de una familia de tradición productora, que poseía unas cuantas manzanas, que habían dejado de producir dado el fallecimiento del propietario original. Se conocen casos en Chinandega, Estelí, Los Brasiles y Veracruz (en Managua), entre otros lugares.
No está de más recordar que la toma de tierras, lejos de resolver a largo plazo la situación de las familias históricamente empobrecidas, más bien atenta contra cualquier intento de ordenamiento de los diversos territorios; las familias a quienes se les está “asignando” nuevas tierras, estarán apremiadas a seguir cualquier orden.
Estas tomas de tierras -propiciadas por el gobierno- tienen dos objetivos: conseguir la base social que necesitan con urgencia y castigar a quienes lo cuestionan.
Por ello, la Fundación de Combatientes de Nicaragua-FUDECON, con el visto bueno del secretario del sandinismo histórico del Distrito 6.2, Juan Rojas, ha enviado apresuradamente una misiva al Presidente Ejecutivo de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados, ENACAL, donde le solicita “sus buenos oficios a fin que le legalicen el servicio de agua potable a la comunidad que está ubicada en los Altos de Veracruz, frente al Country Club”.
Lo que seguramente deja boquiabiertos a muchas y muchos, es la justificación de la solicitud. “No omitimos manifestarle que la mayoría de jefes de familia de esta comunidad están participando activamente en diferentes municipios del país, en el desmantelamiento del golpe de estado que los sectores más recalcitrantes del país pretendieron darle a nuestro gobierno” se lee en el escrito firmado por Oscar Vargas Bustos, presidente de FUDECON y Norlan Edmundo Pineda Vallejos, coordinador del proyecto Altos de Veracruz.