Protestas por liberación de presas y presos políticos

La Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) y familiares de personas privadas de libertad por razones políticas anunciaron que este 26 de octubre, a partir de las doce del mediodía, habrá plantones y piquetes de protesta en Managua, capital de Nicaragua.

Los plantones en los sectores de Movistar carretera a Masaya y el Sistema Penitenciario La Modelo, fueron los únicos puntos anunciados públicamente, los demás se mantienen bajo reserva por motivos de seguridad.   

Violeta Granera, del Consejo Político de la UNAB, dejó claro que no solicitarán autorización a la Policía Orteguista (PO) porque de nada sirve hacerlo cuando ya se conoce la respuesta. Desde septiembre de 2018, la PO mantiene prohibida las movilizaciones ciudadanas, violando por las vías de hecho, la constitución Política de Nicaragua.     

El posicionamiento político de la UNAB

La UNAB dio a conocer su posicionamiento político sobre los 18 meses de lucha cívica del pueblo nicaragüense. “Queremos hacerle un reconocimiento enfático al pueblo de Nicaragua porque a pesar de la represión, de las violaciones constantes a los derechos humanos, de la persecución que estamos sufriendo; especialmente en el campo, el pueblo de Nicaragua no se ha rendido, no se ha sometido, ni se someterá jamás a la dictadura de Ortega”, dijo Violeta Granera.

Agregó que la dictadura de Ortega y Murillo no ha podido ni podrá recuperar ninguna legitimidad a pesar de que está aferrada al poder.

“Queremos reiterar nuestro compromiso y sentido de urgencia con una solución sostenida a la crisis, que pasa por mantener y reforzar la rebelión cívica, la organización y la unidad de todos los azul y blanco”, sostuvo Granera.

“Ninguna dictadura se va por su propia voluntad por lo que llamamos a incrementar la resistencia y organización, la unidad azul y blanco en el territorio nacional y el accionar de la comunidad nicaragüense en el exterior”

Granera advirtió que no habrá ningún proceso electoral que resuelva la crisis de Nicaragua sino se cumple con el respeto irrestricto a los derechos humanos, lo cual tiene que ver con la liberación de presas y presos políticos, el desarme de los paramilitares, un alto a la represión, brindar la seguridad para que las personas exiliadas retornen con tranquilidad a su patria, que se devuelvan todas las organizaciones y medios confiscados, que se permita el retorno de la CIDH y de Naciones Unidas a Nicaragua, ya que es la única forma que tendrá el pueblo nicaragüenses de tener con alguna tranquilidad.

Otra condición, según la UNAB, es que las reformas electorales deben acordarse con la participación del pueblo azul y blanco y sus expresiones organizadas como real oposición al régimen Ortega-Murillo.

“Las reformas deben ser profundas y no un simple maquillaje. El pueblo azul y blanco y su diversidad, expresado en una coalición opositora, debe contar con una casilla propia”.

La asamblea de la Unidad Nacional, de la cual forma parte la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, mandató desde el 15 de junio la conformación de la Gran Coalición Nacional Opositora en contra de la dictadura, por lo que invitaron a todos los actores del país, que no son cómplices de los vejámenes de la tiranía, a sumarse a la misma.

Violeta Granera enfatizó que en la UNAB no están de acuerdo con posiciones sectarias y excluyentes porque cuando el pueblo de Nicaragua estaba en las barricadas nadie estaba pensando cuál era su origen y su posición ideológica.

“Lo único que nos sigue uniendo es la necesidad de liberar a Nicaragua de la dictadura y de construir una nueva Nicaragua”, apuntó Granera.