Sin complejos, Real Estelí de Nicaragua venció a las Águilas del América

¿Qué más se le puede pedir a este Real Estelí? El conjunto nicaragüense se despojó de todo rastro de miedo o algún tipo de complejo para pararse frente a frente contra el más grande rival de su humilde historia.

El multicampeón mexicano Las Águilas del América, parecía ser un dinosaurio que podía devorarse fácilmente al conjunto nicaragüense. Pero el fútbol siempre nos sorprende y bien dice aquella frase en el argot futbolero mundial “los partidos deben jugarse”. Y así llegó el representante nicaragüense que desde el minuto siete de la primera mitad hizo respetar su casa, yéndose arriba en el marcador con magistral ejecución de penalti de Byron Bonilla, que a la postre fue elegido el jugador del partido.

A dos minutos de haber iniciado la segunda parte, Bonilla a través de un tiro de esquina logró encontrar a Marvin Fletes, el que logró cabecear con dirección para vencer nuevamente la meta del conjunto mexicano.

Julián Quiñonez puso el 2x1 al minuto noventa. Pero los seis minutos otorgados como alargue no fueron suficientes para el cuadro mexicano emparejara las acciones para el júbilo de la afición nicaragüense, que vio cómo su equipo obtuvo una victoria histórica, la primera en CONCACAF Champions Cup y la primera frente a un conjunto mexicano de tal envergadura.

Por los nicaragüenses también destacaron Marvin Fletes, que marcó el segundo gol para su equipo a los 47 minutos. Mientras tanto el defensor Ebert Martínez y el portero Douglas Forvis hicieron su juego para contener el ataque mexicano. Con la incorporación del 10, Harold Medina, en la segunda parte, Real Estelí logró dar estabilidad a la media cancha nicaragüense y a generar mejores oportunidades de posesión de balón y ataque.  

De esta forma, Real Estelí, poco a poco, va escribiendo una leyenda que, en la actualidad le califica como el actual mata gigantes del área de CONCACAF, por sus recientes triunfos internacionales ante todos los campeones de Centroamérica. Y su última gesta, vencer al América de México, es la confirmación de que las casualidades no existen para los de Estelí y Nicaragua.