Perro, el animal que predomina en la fiesta de San Lázaro de Masaya

La fiesta de San Lázaro es una tradición católica que se celebra un domingo antes de la Semana Santa. En el barrio indígena de Monimbó esta celebración se conmemora de una forma muy particular, cada año se congregan personas promesantes qué, acompañados de sus animales, principalmente, perros y gatos visitan la imagen de San Lázaro para dar gracias por los favores recibidos.

Las personas preparan las mejores galas de sus mascotas para darse cita desde muy tempranas horas en esta iglesia. Cargan perros de distintos colores, tamaños, razas y disfraces que ansiosamente esperan ser subidos un momento junto a la imagen de San Lázaro y cumplir con su promesa.

Algunos de los testimonios de las personas asistentes es que su mascota estuvo enferma, a punto de morir o incluso habían tenido un diagnóstico crítico, sin embargo, atribuyen que su creencia y su fe en San Lázaro permitió que su mascota sobrellevara la situación y ahora asisten anualmente a conmemorar esta fiesta junto a su amigo fiel.

A esta tradición también se unen personas que, sin tener una mascota, también han recibido un milagro de San Lázaro y son aquellas que padecieron enfermedades de la piel o que parecían incurables, muchas de ellas pagan su promesa repartiendo un pequeño brindis, quemando una candela de cebo o comprando.

imágenes pequeñas para colocarlas al santo y a las que les llaman “milagro” en forma de niño, niña o perro para rezar y dar gracias, según sea lo recibido.

San Lázaro protector de los enfermos y los animales

Según la religión San Lázaro es venerado como el santo protector de los enfermos y de los animales, particularmente se le atribuye la intercesión en casos de enfermedades terminales o graves.

La imagen de San Lázaro es representada con perros lamiendo sus heridas, por eso su relación como protector de los animales en especial de los perros, además simboliza la esperanza de sanación y resurrección.