Ineter advierte del fenómeno “falso inicio” de invierno

El Ineter advirtió que, a partir del 20 de abril de 2024, comenzará el fenómeno conocido como “falso inicio” del invierno en Nicaragua, por lo que se pronostica la ocurrencia de  lluvias y tormentas eléctricas en varias partes del país. 

Marcio Baca, director de meteorología de Ineter, afirmó en conferencia de prensa con medios oficialistas que esperan que el invierno se instale luego del 20 de mayo.

Sin embargo, antes de eso podrían ocurrir lluvias fuertes. Baca afirma que a estas lluvias podemos catalogarlas como “anormales, no es común que esto suceda”. 

En marzo hubo lluvias en algunas partes de Nicaragua y ese podría ser un indicador del comportamiento que se espera al inicio del invierno, asegura Baca. 

Durante 40 años de registro diario de precipitación en Nicaragua, el fenómeno del “falso inicio del invierno” ha sucedido cuatro veces, la última vez en 1998, asegura Baca.  

“Esto puede provocar alta variación de lluvia en el primer trimestre, creemos que sea  producto del cambio de El Niño a La Niña”, afirmó.. 

Baca menciona que las lluvias de abril y las primeras semanas de mayo van a tener ciertas características: 

• Serán lluvias por la tarde o noches

• Serán de periodo corto de entre 30 a 40 minutos

• Van a tener tormentas eléctricas bastantes fuertes, principalmente para León y Chinandega. 

• Van a tener vientos fuertes

• Algunas estarán acompañadas con caída de granizo

Baca remarcó que dichas precipitaciones podrían ocurrir cada cinco o nueve días en diferentes zonas. 

Canícula será húmeda

El periodo de canícula será húmedo, es decir que no habrá mucha ausencia de lluvia durante esos días. El periodo canicular en Nicaragua va del 15 de julio al 15 de agosto. Generalmente, después de la canícula, las lluvias se incrementan. Septiembre y octubre  son históricamente los meses más lluviosos. 

Baca mencionó que la temporada de huracanes del océano Atlántico y el mar Caribe durante 2024 podría ser muy activa y la comparó con la de 1995, la cual fue catalogada como una de los años más húmedos según los registros de la Organización Meteorológica Mundial.