Nicaragüenses con parole podrían ser deportados tras vencimiento

El Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (DHS por sus siglas en inglés), advirtió que las personas beneficiarias del parole humanitario deberán abandonar el país una vez cumplido el periodo de dos años de vigencia que tiene este programa migratorio, de lo contrario podrían ser deportados a su país de origen.

No obstante, las personas que migraron bajo este beneficio, podrán tramitar otra modalidad de permanencia en Estados Unidos antes de que se les venza el periodo de los dos años. Así lo explicó el DHS al canal de noticias Univisión.

Nicaragüenses en el limbo

El programa del parole humanitario es un beneficio migratorio que abarca a ersonas migrantes procedentes de Cuba, Haití, Venezuela y Nicaragua. Sin embargo, de las cuatro nacionalidades, la nicaragüense es la que está en situación más incierta, pues las personas haitianas y venezolanas pueden optar al Programa de Protección Temporal (TPS) una vez vencido el parole, y en el caso de Cuba estos pueden aplicar a otro beneficio migratorio denominado Ley de Ajuste, que les permite tener residencia permanente de Estados Unidos.

Las personas migrantes nicaragüense no tienen acceso a ninguno de esos beneficios, por tanto, lo que les queda es gestionar el asilo antes del vencimiento del parole o buscar otra alternativa que regularice su situación migratoria para no ser deportadas.

“A quienes no se les conceda asilo u otros beneficios de inmigración, deberán abandonar Estados Unidos al vencimiento de su período autorizado de libertad condicional o, generalmente, serán colocados en procedimientos de deportación después de que expire el período de libertad condicional” advirtió un funcionario del DHS a Univisión.

Lo que podría ser una tabla de salvación para las personas nicaragüenses sería la aprobación del TPS, o bien la extensión del beneficio del parole por dos años más. Sin embargo, eso dependerá de la decisión que tomen las autoridades estadounidenses al respecto.  

Más de 93 mil nicaragüenses han sido beneficiados

De acuerdo el Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza del EE.UU. (CBP, por sus siglas en inglés), entre enero de 2023 y julio 2024, un total de 93,325 nicaragüenses han sido beneficiados con el programa migratorio parole humanitario, de los cuales 86,101 pudieron viajar y se encuentran en territorio estadounidense.

El parole humanitario es una iniciativa que surgió en abril de 2022 para beneficiar a migrantes ucranianos que huyen de la guerra en su país generada tras la invasión de Rusia. En octubre del mismo año, el gobierno estadounidense incluyó a migrantes venezolanos en el programa migratorio y en enero de 2023, a Cuba, Haití y Nicaragua.

En mayo pasado, el director del Programa de Migración, Remesas y Desarrollo de la organización internacional Diálogo Interamericano, Manuel Orozco, advirtió en un artículo publicado en Confidencial, que muchas de las personas favorecidos con el parole humanitario aún no habían hecho solicitudes de asilo, asimismo señaló que la gran mayoría de nicaragüenses que ha llegado a Estados Unidos, se encuentra bajo un estatus irregular.

“Lo que se avizora es una situación crítica para miles de nicaragüenses, cuando al vencerse su parole y no tengan opción de pedir asilo, entrarán en condición de retorno y la situación se tornará emocional y materialmente crítica” vaticinó Orozco.

El experto advirtió que la permanencia en el poder de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo más allá del 2026, representa un riesgo enorme para migrantes que quisieran retornar a Nicaragua, “especialmente cuando el régimen ha dicho que no los recibirá si vuelven”.

También indicó que otro riesgo para las personas migrantes nicaragüenses sería una eventual victoria electoral de Donald Trump en las elecciones de noviembre próximo, dado que este frecuentemente recurre a un discurso político antinmigrante el que ha sido parte de su campaña electoral. 

Orozco vaticinó que la situación de las personas migrantes de origen nicaragüense en Estados Unidos “será incierta y preocupante para los próximos tres años".