Sobre el Discurso de Bienvenida de Ramona Rodríguez en la Sesión CXIV del CSUCA
- 01 Sep 2019
- 4:35 p.m.
“La universidad es por definición universal y en ella caben todas las tendencias y modos de ser. Es por eso humanista por excelencia y si combinamos el concepto que da su vocablo con el de libertad, tendremos una suma preciosa, ya que la libertad que busca la universidad es la del espíritu”
Doctor Mariano Fiallos Gil Padre de la Autonomía Universitaria
Esta es la cita que se transgrede por el cinismo con el que fue utilizada, para brindar un discurso de bienvenida a los rectores y autoridades universitarias de diferentes universidades de Centroamérica y del Caribe, en la sesión CXIV del Consejo Superior Universitario Centroamericano y caribeño, CSUCA; realizada el pasado 20 de agosto del presente año en La Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, Managua (UNAN-Managua)
La UNAN entre el discurso y la práctica a propósito de la 114 sesión ordinaria de CSUCA en Nicaragua
La Universidad en Nicaragua es lo que ya en varias ocasiones se ha repetido, un centro de adoctrinamiento en el que se fomenta mediante el propagandismo que, en un intento de justificarlo con la historia de Nicaragua, procura perpetuar un ideal; que no es ideal sino el opio de la conciencia crítica. Y reproduce como, hace más de cuatro décadas atrás, ahora no sólo a nivel nacional, sino también en los centros de difusión del conocimiento, los discursos oficialistas, los símbolos, y papelones como los que tenían un “Somoza sonriendo”; en forma de culto a la figura humana, pero ahora es una bandera.
El discurso no es que carezca de contenido, carece de práctica, que es aún peor. Y dice todo lo que ya se ha dicho y escuchado en los medios oficiales sobre la promoción de la paz y la reconciliación, pero lo que nunca dicen es que se impone a la fuerza y sin justicia ni reparación verdadera.
La universidad Latinoamericana siempre ha sido un agente activo en los contextos convulsionados y ha impulsado esos cambios sociales que a gritos pide la sociedad, en un deseo de que; mediante la transformación, se lleguen a nuevos horizontes y se den por efectuado esos relevos generacionales e históricos que son necesarios, somos humanos y seres vivos que poseen actividad muy activa y dinámica, capaz de; en base a su entorno, cambiar o permanecer y proceder a cambiar el entorno. En esta participación activa de promoción la Universidad en Nicaragua se ha quedado chinga.
Y no es verdad que respetan el sentido de universalidad, libertad y sentido humanista, pues ésta adopción de un discurso oficial lo deja claro, en la estigmatización de las nuevas tendencias de pensamiento, que son sometidas de diferentes maneras y a diferentes niveles. La implementación de políticas estatales, por ejemplo, que siguen un lineamiento político partidario con el fin de controlar esas “convulsiones” o “levantamientos” es transgredir la libertad. Y además de la transgresión de la libertad está la de la autonomía universitaria, que hoy por hoy es un concepto viciado y en necesidad de redefinirse en base al contexto en el que estamos.
Realmente debe haber una sed en todos nosotros de discursos que sometan a debates las ideas y propongan o reacciones ante los “contextos convulsionados”, también debe haber autoridades que sean beligerantes en la promoción de esa consciencia que es muy necesaria y piensen por sí mismos para el bienestar de la sociedad, que dejen a un lado los discursos fantasiosos y las realidades alternas, que tengan el valor de desafiar la misma autoridad que pretende establecer leyes incoherentes o injustas. ¿Qué más incoherente que el discurso de paz y reconciliación? ¿Qué más injusto que el profanar la libertad dela Universidad?
“Cuando una ley es injusta, lo correcto es desobedecer”
Mahatma Gandhi
¡A la Libertad, por la Universidad! ¡Sin Autonomía no hay Democracia