"Pase del Niño Dios”: una tradición llena de gratitud, esfuerzo y amor

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Niñas y niños de San Juan de la Concepción, participan cada domingo en ensayos para celebrar el “Pase del Niño Dios”. • Foto: Onda Local / Cortesía

Entre devoción y cultura, la feligresía de la parroquia San Juan Bautista, en el municipio de La Concepción en el departamento de Masaya, se prepara para festejar el nacimiento del Niño Dios con diferentes actividades, entre ellas el tradicional “Pase del Niño Dios”.

La novena al “Niño Dios”, inicia el 16 de diciembre y finaliza el 24; desde mediados de diciembre, cada año la feligresía ofrece bailes, encuentros, rezos y otras actividades como muestra del fruto de su trabajo a Dios, así lo describió Julia López, quien es familiar de la mayordoma de las fiestas del Niño Dios de este año y además es catequista de la parroquia.

“Nos estamos preparando para que nazca en nuestros corazones (el Niño Dios), especialmente en los hogares nicaragüenses”, expresa López.

Los villancicos son parte fundamental de la celebración

Cada año una familia asume la coordinación de las actividades, en este 2023 desde el mes de septiembre la familia López Aguirre, recibe a un promedio de 40 niños y niñas en su casa para ensayar el tradicional “Pase del Niño Dios”, que es una “especie de pesebre viviente” que incluye un desfile colorido y armonioso que representa a cada uno de los personajes bíblicos que llegaron a saludar a Jesús el día de su nacimiento en Belén.

“Nos estamos preparando con ensayos para los pastorcitos, hemos comenzado desde el 2 de septiembre para que todo salga bien con estas alabanzas, esos reconocidos cantos navideños alusivos al Niño Jesús”, expresa López. 

El profesor Henry Moreno, quien se encarga de la preparación del “Pase del Niño Dios”, dice que a la niñez participante se le enseñan los villancicos.

Narra también que cada domingo dedican dos horas en casa de la mayordoma, Dina López, para practicar los villancicos de Navidad. "A cada niño y niña se le entrega una hoja con todos los cantos para armonizar la práctica y agilizar la preparación de todos los participantes. Aquí la edad no es un límite. Tenemos niños desde los 5 años hasta los 12. detalla.

¿Cómo se celebra el Pase del Niño Dios?

Según Silvia Flores, mamá de uno de los niños que representará a un pastorcito, el llamado “Pase del Niño Dios” no solo expresa una fiesta popular de la Iglesia católica, sino que también refleja el amor de los niños a Dios. “Le inculcamos a los niños que ellos deben tener ese espíritu de amor a Dios”, indica.

Desde hace más de 2 años, Flores acompaña y apoya a su hija de 10 años en esta celebración. Dice que es una muestra de sacrificio por las “gracias o bendiciones recibidas”. “Venimos de una familia bien religiosa donde se le inculca a cada niño el amor al prójimo y el verdadero camino a Dios”, añade.

En Nicaragua “El Pase del Niño Dios”, se realiza la noche del 24 de diciembre y tiene como centro la imagen del Niño Dios, la cual es rodeada por la niñez de la ciudad vestida con disfraces de carácter religioso o étnico y que van acompañados de sus familias.

Posteriormente, la niñez se prepara para entrar en procesión al templo y entregarle al Niño Dios ofrendas. La imagen de Jesús es cargada por una niña y un niño que representan a la Virgen María y a San José, a quienes también se les conoce en este tiempo como “los peregrinos”.

“Cada pareja pasa y le entrega una ofrenda a los peregrinos; se les lleva una sabanita, unos zapatitos, una albahaca o el ramo de ruda que son tradiciones del pueblo que se ha practicado desde hace tiempo”, describe Moreno.

Históricamente esta actividad se realizaba en las calles y era acompañada por bandas filarmónicas o “chicheros”, sin embargo desde el año pasado, se realiza dentro del templo y en casa de la mayordoma ante la negativa de permisos por parte de las autoridades policiales. 

La mayordomía incluye preparar alimentos y arreglos 

La familia mayordoma además de coordinar el “Pase del Niño Dios” también debe preparar y organizar el “brindis” o “compartir” que se entregará a toda la feligresía que acompaña esta celebración.

“Nos estamos preparando también económicamente para el compartir de ese día, como es la comida, las golosinas, los nacatamales”, que son una tradición manifiesta Guadalupe López, madre de la mayordoma,

“El traje que llevan los niños lo costean los padres de familia, pero lo que es la comida y todo eso lo cubre la madrina que es Dina, quien hace esto por una promesa. Es un sacrificio a Dios como una ofrenda del trabajo de nuestras familias”, afirma.

Finalmente la mayordoma debe garantizar las decoraciones del templo que consisten en la creación de un pesebre donde será expuesta la imagen del Niño Jesús el próximo 24 de diciembre.

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