Abandonados por las autoridades y vulnerables ante los embates del mar

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Una de las casas que está a punto de desaparecer por el mar en el barrio costero Gonzalo Brenes en Corinto. • Foto: Caio

La población de los barrios costeros de Corinto, un municipio portuario, ubicado en el departamento de Chinandega, ha sido abandonada por las autoridades a merced del mar, que mes a mes devora sus casas.

Esta es una situación que prueba que el océano Pacífico está aumentando de nivel y está erosionando las costas.  

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Al menos tres kilómetros de costas, en las que había decenas de casas, han sido destruidos por el océano Pacífico. Las olas desmoronan poco a poco las viviendas ubicadas en los barrios costeros de El Chorizo, San Martín, 14 de septiembre, Gonzalo Brene y la INVI.

La casa de Guillermo Coral y Ángela Martínez. El mar practicamente se devoró su patio.
La casa de Guillermo Coral y Ángela Martínez en el barrio Gonzalo Brene. El mar se tragó su patio. Fotografía: Caio. 

Onda Local recorrió esa franja costera en la que se aprecian escombros. La imagen da la impresión de que un tsunami pasó por ahí. A pesar que esto viene ocurriendo con mayor fuerza desde 2019, el Gobierno Municipal de Corinto no ha reubicado a las familias que aún viven en las costas.

Según Nelson Treminio, concejal opositor de la Alcaldía de Corinto, controlada por el partido Frente Sandinista, hasta ahora no se ha reubicado a nadie. Ni siquiera conoce un censo de la cantidad de casas que han sido barridas por el mar y el número de personas afectadas.

De milagro, nadie ha muerto, asegura Treminio. La pareja de ancianos Guillermo Coral y Ángela Martínez, son de los que aún viven en la costa, específicamente en el barrio Gonzalo Brene.

 

A pesar de que un dique de piedra está como barrera contra las olas, su casa ha perdido más de la mitad de su patio. La próxima marejada ellos podrían perder su hogar. “Nosotros tenemos 26 años de vivir aquí, pero el mar era largo”, asegura Martínez.

Coral cuenta que cuando llegaron, la costa no era una zona de tan alto riesgo como ahora. Sin embargo, el Gobierno Municipal de Corinto, prácticamente culpabiliza a la gente por vivir en una zona de alto riesgo, asegura Treminio.

Coral y Martínez cuentan que, si su casa llega a ser destruida, tendrán que pedir a sus hijos un espacio en sus hogares.

Las personas han intentado proteger sus casas con barreras de llantas, sin embargo, el mar lo destruye. Fotografía: Caio

Treminio afirma que en la última sesión de mayo del Concejo Municipal de Corinto, propuso que las familias de los barrios costeros fueran trasladados. “El 27 de mayo en la última sesión, yo toqué el tema en los puntos varios, porque la reunión se estaba dando por terminada, pregunté qué se podía hacer con esta problemática y propuse que se busquen terrenos fuera de Corinto para que se hiciera un proyecto habitacional y se resolviera de esta forma el problema”.

En la sesión estaba el alcalde de Corinto, Absalón Martínez, quien descartó cualquier posibilidad, según Treminio.

“El alcalde dice desconocer quienes son los dueños de los terrenos y por ende, no pueden hacer nada”, revela el concejal. La alcaldía de Corinto, controlada por el sandinismo, pasa la responsabilidad de reubicar a las familias que viven en la costa a la Empresa Portuaria Nacional (EPN) y al Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI). “Esa es la postura de la alcaldía”, señala Treminio.

Mientras, Coral y Martínez, sostienen que han solicitado al gobierno municipal ser reubicados, pero no han sido escuchados.

¿Y el Gobierno Central?

Las únicas acciones que se han hecho para ayudar a estas personas son la construcción de un espigón de piedras y la colocación de geocontenedores.

En 2019, el régimen gestionó con Taiwán el proyecto para colocar geocontenedores. Todos los geocontenedores se colocaron en 2020, pero al cabo de 1 año, la mayoría ya fueron tapados de arena y otros fueron destruidos por los objetos que arrastraban las olas o por vándalos.

La erosión que provoca el mar ha desplazado a miles de personas. Casi todos los negocios en esa franja costera han sido destruidos. Fotografía: Caio.  

Los espigones de piedras se colocaron después con el objetivo de reducir la fuerza de las olas. Este se extiende desde el barrio El Chorizo hasta la zona conocida como INVI. Esto ha sido construido por el MTI.

Hasta el momento, la población no ha recibido ayuda por parte de El Carmen, sitio donde habita Daniel Ortega y de donde opera su gobierno. La principal demanda de las personas afectadas es ser reubicadas. Pero se sienten tan desatendidos que con la última marejada que los afectó a mediados de mayo, no recibieron ni siquiera frazadas.

El gobierno solo ofrece evacuarlos a refugios temporales en donde no pueden permanecer más de tres días porque luego les piden alojarse donde un familiar.

¿Qué provoca el aumento del mar?

Los pobladores tienen sus hipótesis sobre que está causando que el mar crezca y se coma sus casas. Treminio, el concejal opositor, cree que este problema se deba a la falta de drago en la costa de Corinto. Explica que en Corinto cada cinco años se debe hacer un dragado para reforzar el dique de arena que está frente a línea costera de los barrios.

Treminio recuerda que el último dragado se realizó en 2005. Maynor Romero, habita en el barrio Gonzalo Brene y considera que el dragado puede ayudar a disminuir la fuerza del mar.

Romero ha visto como el mar arrasa todo lo que le pongan enfrente. Primero los geocontenedores y después el dique de piedra. Algunas personas colocaron neumáticos alrededor de sus casas o grandes sacos rellenos de arena, pero nada ha podido detener el mar.

“Esto es producto del cambio climático”, asegura Romero. El Centro Humboldt, organización clausurada por el régimen este año, afirmó a La Prensa en 2019, que el último dato proporcionado por el Ejército de Nicaragua indicaba que al mes, Corinto perdía 43 metros cúbicos de playa.

No se conocen más datos sobre la cantidad de costa que el océano Pacífico le ha ganado a Corinto. 

Una isla de arena y conchas de mar

De acuerdo con el geólogo Eduardo Mayorga, Corinto es una isla. Durante su tiempo en el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) realizó excavaciones de pozos y logró constatar que Corinto prácticamente está hecha de arena de mar y conchas marinas.

Según Mayorga Corinto es una isla muy baja, siendo la parte noroeste de la isla, la más baja, de 0 a 6 metros sobre el nivel del mar. Mientras, la parte sureste, tiene alturas de 6 a 9 metros sobre el nivel del mar.

En el análisis que realizó sobre la erosión costera que ocurre en Corinto, Mayorga detalla que en 2006 aparece construido el primer dique de piedra en la zona noroeste y continúa funcionando hasta la fecha.

Pero en 2010 es que aparecen las primeras evidencias de erosión costera en el sur de la isla. Posteriormente, en 2011 construyeron los primeros 16 espigones, para tratar de contener la erosión. En 2015 se construye el primer dique de piedra en el sureste de Corinto y en 2017 se colocan los primeros geo-contenedores o geotubos.

“Todas las obras de protección costeras, espigones, diques de roca y geo-tubos, han funcionado temporalmente. Para darle una solución final, definitiva a este problema de erosión costera, se debe contratar a una empresa con comprobado éxito funcional permanente, en el diseño y construcción de obras de protección costera. Habría que buscar una empresa en algunos de esos países que han tenido éxito, a nivel mundial reconocido en construir obras de protección costera o en ganarle espacio al mar”, asegura el experto.

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